domingo, 17 de junio de 2012

Ninguno como Él


Gregory Peck
Hola, ¿que tal este largo domingo de casi verano?, espero que bien. Yo estoy escribiendo este post con una sonrisa en la boca. Gracias a mi amiga bloggera Labienquerida que nos ha hablado en su entrada de un guapo cantante, he sentido la necesidad de rendir un homenaje a "mi chico guapo" de todos los tiempos, y que me perdone mi chico "real", ¿pero vosotras no tenéis un ideal de amor platónico en vuestra vida? Bueno, no se si vosotras sí, pero yo desde luego, y lo tenía un poco olvidado hasta que ayer volví a ver una película suya, "Horizontes de grandeza", y volví a mirarme en sus ojos marrones y profundos, donde te pierdes como en un sueño. Sus ojos siempre es lo que más me ha atraído de él, grandes, expresivos, capaces de reflejar calidez y dulzura, odio y dureza, todas aquellas emociones capaces de sentir un ser humano, él era capaz de reflejarlas. Para mí, uno de los mejores actores de todos los tiempos. 

Quedaron grabadas en mi memoria escenas inolvidables, de "Duelo al sol", y sentí miedo al verlo en "Mobi Dick". Recientemente, lo volví a descubrir en "Matar a un ruiseñor" cosa que hizo que me comprase la novela original con él caracterizado en la portada. Una novela ideal para el verano, no digo más.

Un gran actor que, reía cuando decía, que le debía lo que era a otro grande Cary Grant, ya que le ofrecían a él los papeles que Cary rechazaba.

Gran persona, como demostró durante su vida realizando labores humanitarias, y gran amigo, como lo afirmarían todos los que lo eran, como mi gran Audrey Hepburn. Me encantó que fuera su pareja en  "Vacaciones en Roma". Aunque él, por aquel entonces era más conocido que ella, sugirió al director que ella encabezase los títulos, porque pensaba que Audrey sería una gran estrella.  Siempre fue generoso con sus compañeros.

Ha sido mi ideal, tanto por lo guapo que era, como por como era como persona. Un cuerpazo sin personalidad y sin que me transmita algo,  nunca me hubiera atraído.

Este tributo es para él, para ese amor platónico que nos acompaña secretamente en nuestra vida. El mío se llama Gregory Peck, y este es mi homenaje.
               No os dejeis llevar por la primera imagen de este video, el contenido es memorable.

Espero, que como yo tengáis una sonrisa dibujada en vuestra cara. Si tenéis tiempo, os recomiendo pinchar en los diferentes enlaces, si os gusta el cine clásico vuestra sonrisa será más ancha.

viernes, 8 de junio de 2012

En Mérida

(Primero hay que leer Cáceres)
Teatro
Mérida es esa ciudad que si no has estado en Roma y te quieres hacer la ilusión de vivir unas horas a lo Quo Vadis, te puede servir más que de sobra. Repito, no voy a sustituir a los del punto i, que están frente al Museo de Arte Romano, pero os tengo que decir, que este museo merece la pena verlo tanto como el Teatro, el Anfiteatro y el Circo. Mi consejo, visitarlo en las horas de más calor.
Entrada combinada
Ah! otra cosilla. Hay una entrada combinada que cuesta 12€ y te permite ver varios monumentos y restos antiguos. Sinceramente, lo que más merece la pena ver es el Teatro, y el Anfiteatro, Los demás no sé por qué me parece que son gratis, pero aún así te "pican" la entrada. De todas formas creo que estos dos monumentos ya compensan la entrada más que de sobra. Si no hace mucho calor recomiendo ver todos, y cuidado en la Alcazaba, hay una especie de aljibe, que se llena de agua del río, y que tiene peces y todo. Se baja por unos túneles que hay en el patio, que pasan un poco desapercibidos y la gente no los ve. Es algo diferente.
 

Por cierto para comer, no vais a tener problema, te asedian con folletos de restaurantes. Nosotros fuimos dos días y gracias a dios no salimos traumatizados gastronómicamente más que uno, el primero. Teníamos como seis o siete folletitos con comidas, y nos decidimos por un chico muy simpático que nos convenció de que además de buena comida, tendríamos su simpatía. Mi chico y yo, somos dos almas de pollo, que nos creemos lo que nos cuentan, así que con una sonrisa en la boca nos dirigimos al idílico lugar...a ver la cruda realidad. Además de la realidad, estaba crudo el pollo que nos pedimos, y una carne, que tenía también sabor de antaño, por las veces que se había recalentado. Acompañaron a estos ricos manjares unas migas de rancho y un revuelto de verduras que podría salvarse de la quema. De postre a mi novio le trajeron una mouse de chocolate del Dia, y a mi, un gel a medio descongelar con sabor dulce y con escarcha por encima. El restaurante en cuestión era Restaurante Minerva 
No sólo fue que la comida era intragable, es que no había nadie, el dueño se estaba poniendo nervioso, ya que no hacía más que entrar y salir, y de fondo en una televisión gigante, Colombo nos observaba y nos daba conversación, porque a nosotros se nos había acabado nada más sentarnos. Por fin apareció el simpático chico que nos convenció, al que nada más entrar, el dueño le dio una colleja y lo mandó por ahí. He de decir que la colleja parecía amistosa.
Jardines del Teatro y Anfiteatro
Al día siguiente, no repetimos en el mismo sitio para comer, y nos inclinamos por ir al Restaurante Capitel
ya que su dueño nos convenció de que su restaurante era para comer bien. Esta vez no nos engañaron, este restaurante es de los mejores sitios donde he comido y al mismo precio que el otro, un euro de diferencia les separa en cuanto a coste del menú, y un abismo en cuanto a la calidad de su cocina. Si tuviera que describirlo en dos palabras sería, in-mejorable. A la cocinera o cocinero habría que darle tres besos, uno por cada plato y el postre.

Puerta del baño
A la hora de salir por la noche, no os puedo decir, estábamos rotos, dos horas de tren bucólico pastoril diarias, de Cáceres a Mérida a través de dehesas sembradas de olivos, alcornoques, cerditos, vacas, conejos correteando, y encinas. El recorrido turístico festivo de las dos ciudades, que dan para pasearlas mucho y bien, nos han hecho caer literalmente rendidos en la cama antes de media noche y dormir como cestos en nuestra habitación con una sonrisa en la boca.
Aquello está lleno de cigüeñas

Hasta la próxima escapada, aunque yo aún sigo saboreando esta.

Cáceres

Cáceres
Hola a todo el mundo. Acabo de volver de una escapada a Cáceres, una ciudad para descansar de tanto estrés madrileño y tanto veneno informativo. Llevaba bastante harta un tiempo y mi chico, viendome los pelos como escarpias y un caracter más parecido al del limón que de costumbre, me dió pié para tomar la decisión y desenchufar.. Así que el jueves pasado tiramos del cable de la rutina y nos metimos en el regional  que lleva a Cáceres. No tuvimos la suerte de pillar los media distancia nuevos, y nos tocó el antiguo regional que llevo toda la vida viendo pasar por mi pueblo. Esté prometía ser un viaje al pasado en todos los sentidos.

No pienso reemplazar al punto i de información turística, que ellos lo hacen muy bien, esta es una entrada de, lo que me ha gustado y lo que no, para que otras almas de pollo como nosotros,  no piquen. 

Cáceres medieval
Lo primero de todo, ponte calzado cómodo. Si lo que quieres es ver Cáceres y empaparte de su ciudad vieja y bien conservada, calzate para subir y bajar calles medievales empedradas. Yo sinceramente me mato con tacones en el felpudo de mi casa, y sé que hay chicas que van con los tacones como si fueran descalzas por caminos de cabras. Dependiendo de lo propensas a los esguinces de tobillo que seais, ya decidís vosotras. Cada una es muy dueña de su vestuario, yo ahí lo dejo.
Ropa fresquita y agua. Repito que la ciudad es preciosa pero con subidas y bajadas considerables, y a partir de determinadas fechas, ya aprieta el calor.
Una buena cámara de fotos. Por dios, esos momentos hay que inmortalizarlos.
Busca el punto i de información turística. Lo tienes en la Plaza Mayor
La mejor época para visitar esta zona: Primavera y Otoño




Alojamiento:
Nuestra habitación
La suerte quiso que descubrieramos una oferta de un hostal peculiar. El Palacete de la Alameda. Resulta que ahora está de moda todo aquello a lo que la gente llama "Vintage". Bueno pues como no soy yo tan "glamurosa" para estos términos, os diré que  voy a sustituir este término, que a mi me parece tan ambiguo y no muy descriptivo,  por otro que me parece que hace esta labor más claramente. Bueno a lo que voy que me lío. En El Palacete de la Alameda, descubrimos el auténtico sabor de antaño. (Este término me gusta más, es más nuestro) Una casa antigua recuperada, donde se conservan los elementos de otras épocas, desde los suelos originales, hasta los muebles, con un ambiente que te transporta a un mundo que no es el nuestro, con patios donde puedes desayunar, balcones de hierro,  escaleras al pasado y habitaciones de techos altos y siestas frescas.
Un gran baño
Nuestra habitación era muy grande, y el baño que contenía  era, más que espacioso, con bañera y todo, vamos que se podía bailar de haberlo querido. Lo digo así en plan sorprendente, porque en algunas ocasiones nos hemos metido en auténticos "zulos", pero en estas habitaciones, te puedes dar tus paseitos y todo.
Tengo que decir que nosotros no lo encontramos por la página en sí, sino por el buscador trivago y nos salio más económico que en la propia página del hostal.

La comida en Cáceres:
Despues de recorrer medio Cáceres buscando el restaurante Oquendo... Aclaración: En un programa de televisión, Extremadura Directo, creo recordar. Salio un cocinero, llamando Marichocho a una reportera que no sabía el proceso de rebozado en un pescado que estaba cocinando. El acontecimiento tuvo bastante repercusión y daba mucha risa verlo, por lo que fue de los videos de youtube más vistos el año pasado. Y como mi novio es un friki, y le había hecho tanta gracia el tío, continúo, ...no podíamos ir a Cáceres y no ver el restaurante donde trabajaba. Así que a las dos de la tarde y sudando a chorros, descubrimos el restaurante, vimos que sólo el menú del día costaba 29€ por persona, y nosotros que somos "de bajo coste" nos fuimos, no sin antes, hacerse mi chico una foto en la puerta del restaurante, como premio de consuelo por no haber visto al famoso cocinero.
Fuimos buscando y comparando y acabamos en la calle Pintores entrando en el Restaurante Centro. Un sitio muy chulo que aunque tiene terraza en la plaza, merece la pena entrar dentro, ya que el salon está situado como en una antigua bodega, con el techo de ladrillo antiguo. Ya os había dicho que este iba a ser un viaje al pasado. El menú costaba 9€, con bebida y pan incluidos, lo que no te incluía era el postre, que si querías era 1€ más. Por cierto el flan de nata es una pasada. Tienen menu de día y de noche por lo que nos dejamos caer alguna que otra noche despues de visitar Mérida.
El último día, cambiamos y fuimos al que había justo al lado, el Restaurante Pintores 33, y resultó tan bueno o mejor que el anterior. Según dice la leyenda pertenece al mismo dueño. A ciencia cierta, no se sabe, pero la verdad sigue estando ahí fuera.

miércoles, 6 de junio de 2012

La Frase Que Yo He Escogido

Hola a todo el mundo. Esta entrada la escribo aceptando un reto de mi compi La Bien Querida, "La frase que yo he escogido" una iniciativa de una blogger que ideó un sistema de entradas en las que escoges a varios blogs amigos y animas a sus blogger a que hagan una entrada con su frase favorita, una frase que les marcó, o la frase que consideren más inspiradora. 
Así que siendo elegida por mi compi bloggera, me dispongo a contaros las dos frases que más han influido en mí y por qué. Primero aclararos que no pude escoger una sóla y me he ceñido a dos que para mí es todo un logro.

Primera frase:
"Malditas sean las guerras y los canallas que las apoyan"
La frase no tiene demasiado comentario. Es así y ya está. Esta frase la pronunció Julio Anguita cuando en 2003 conoció la muerte de su hijo, corresponsal de guerra. 
No es la importancia o no de la persona que la pronunció, sino su significado. El dolor de perder a alguien por una causa absurda y ajena. 
Porque todas las guerras son absurdas, ya que no hay nada que justifique la muerte prematura de seres humanos sanos y con un objetivo de felicidad,  y ajenas, ya que sólo sirven para satisfacer el ansia de personas enfermas mentalmente, que con la excusa de una afrenta patria, la conquista de nuevos territorios y riquezas, que su religión es mejor que la del vecino, o la más común; que para enriquecerse necesita vender armas y para venderlas fomentan y apoyan sivilinamente a diferentes enfrentamientos que sangran a países enteros, la "lían parda" y se disponen a acabar con la vida de cientos o miles de personas, yéndose por las noches tan tranquilo a la cama, satisfecho consigo mismo por el logro conseguido.
Todo eso para mí  es un asesinato vestido de noticia de telediario y que la gente ya por inmunidad o hastío escucha casi como entretenimiento, mientras descansa o come.
Creo que esta frase nos saca de nuestro letargo y le da la dimensión correcta y clarificadora a las guerras y a aquellos que las apoyan. De mi parte también ¡malditos sean!

Segunda frase:
"Mi vida está llena de desgracias, algunas de las cuales jamás sucedieron"
Me encanta esta frase. Es de Descartes. Supongo que habrá más gente como yo, que se sobrepreocupe y al final sea para nada. Normalmente este tipo de preocupaciones empiezan por un "...y si?" y generalmente va seguida de agobio. Es cierto, muchas veces nos agobiamos por cosas que no han pasado, y que no son reales. Pero en cuanto nuestra cabecita se posa cual mariposilla atolondrada en una preocupación,  ahí vamos, de cabeza al problema, peligro o desgracia que nos atrapa y nos hace sentirlo como si de verdad estuviera sucediendo. Esto me lleva a otra frase que hace poco me dijeron y que también me hace mucha gracia: "Hay que ver lo que sufrimos por no sufrir".

Bueno, aquí termino mi objetivo de hoy "La frase que yo he escogido" y como parece ser una iniciativa bastante chula, aquí van mis cinco blog elegidos para que nos relaten su frase más inspiradora, bonita o qué se yo, la que les apetezca en ese momento. Ahí lanzo el guante para quien lo quiera recoger :D


Cansada de besar sapos
El templo del mono
Secondo me
Viviendo para contarlo
Uno de estos días